15 julio 2015

LA HORA DE LOS MIURAS


La temporada pasada el Mallorca adoleció de mucho fútbol. De demasiado fútbol.  Y el año del Centenario no permite error. Toca ascenso y con buenos futbolistas todo será más sencillo. Por ello, es momento de reflexión.
¿Qué ha hecho hasta ahora el equipo rojo?
El Mallorca ha conseguido una pieza fundamental. Un futbolista perfil Héctor Yuste es imprescindible en un equipo de Segunda División con una única aspiración; el ascenso. Él puede ser el bastión del centro del campo y su fichaje es un acierto mayúsculo.
Un portero, Timon Wellenreuther, que debido a su juventud acrecienta dudas de rendimiento. Sí, él puede crecer pero, en el año del Centenario, el equipo necesita eficacia inmediata. La incógnita es evidente.
Dos laterales que deben mejorar el rendimiento del año pasado. Oriol y Campabadal pueden conseguirlo. Aquí, en principio, hay acierto. Ambos pueden incrementar prestaciones y Biel Company debe convertirse en espoleta de reacción. Después el fútbol dictará su sentencia.
Moutinho fue futbolista de perfil medio bajo en un equipo que luchó por no bajar. Sí, cuenta con habilidades interesantes y posibilidades de crecimiento. Diestro, dominador del regate con embestida y velocidad corta, esconde su pase de izquierdas e intenta eficacia en saque estrategia. Mejor córner a pierna cambiada que natural. Evidentemente no fue el futbolista más determinante del Albacete. ¿A quién le ganará el sitio?
Un equipo con aspiraciones de ascenso está obligado a blindar el eje de su defensa. Sin Pedro Bigas, el mejor central del curso pasado, las dudas se ciernen sobre esta posición. Hugo Gomes es un interrogante mayúsculo. Solo la seguridad del director deportivo, así como la del Presidente, al explicar sus características le otorgan una vitola que deberá demostrar. Tiempo y fútbol habrá para ello.
A partir de aquí queda mucho trabajo por hacer. Fortificar más la defensa. Alguna alternativa creativa en el centro del campo. La posibilidad de manejar el último pase. El DELANTERO. Sí, con mayúsculas. El killer capaz de amenazar, y si es posible de marcar, a cualquier rival de la categoría. Ahora, llegó la hora de los Miuras. Fichar aquello que dará posibilidades reales de ascenso.

“Dos errores no hacen un acierto" Thomas Szasz