28 abril 2013

QUEDAN MUY TOCADOS, PERO ...





La derrota deja al Mallorca tan tocado como necesitado. Volvieron a aparecer los mismos errores que han lastrado toda la temporada. Porosidad defensiva, presión de mantequilla y poco fútbol trenzado. El partido empezó de la mejor forma posible. Gol a favor y juego en campo contrario. Pero  el Zaragoza simplemente a empujones cambió la tendencia. Eso y el miedo a perder hicieron el resto. Los mallorquines hicieron, en líneas generales, un mal partido.
Gregorio Manzano movió su alineación y no ganó ni en seguridad ni en eficacia. Hutton y Antonio López intentaron cerrar los flancos. No lo consiguieron. Conceiçao, después Nunes, con Geromel tenían que asegurar el eje y se vieron superados más veces de las deseables. La línea de retaguardia volvió a mostrar una inseguridad excesiva y terminó siendo sangrante. En el centro del campo se juntaron Martí, Tissone y Pina para buscar el colapso. Tampoco se consiguió. Y arriba Hemed y Alfaro trabajaron para ofrecer a Giovani un poco más de espacio y tiempo. El mexicano debía sembrar amenaza y sólo pudo aparecer en escasas ocasiones.
El tercer gol del Zaragoza no hizo más que mostrar la decadencia de todo el año. Nunes salió de posición, Geromel llegó tarde a la cobertura y Aouate encajó por su palo. Aquel triángulo mágico formado por centrales y portero es historia. 
Al final se sumó una nueva derrota y se encajó el gol número sesenta y siete. Ahora se abren los últimos cinco partidos de competición pero el siguiente es casi terminal. Perder ante el Levante será casi dictar sentencia. El Mallorca se la jugará ante un rival con nervios de acero y que domina a la perfección el repliegue con presión. Ya no quedan excusas posibles que lanzar. A partir de ahora llegan los partidos sin red. ¿Se sabrán jugar?


27 abril 2013

EL EMPATE NO SE PUEDE DESPRECIAR




No es partido terminal pero sí de importancia capital. Conquistar tres puntos siempre es el objetivo final pero, en esta ocasión, eludir el descalabro es casi imprescindible. La derrota abriría brecha y colocaría a los rojos en una posición altamente incómoda.  El Zaragoza lo sabe e intentará hacer sangre. Su trayectoria es tan nefasta como la del Mallorca y bajo el escudo de la afición intentarán disparar el condicionante de la presión ambiental.
En cualquier caso conviene recordar que este rival también tiene vergüenzas que esconder. Su dinámica negativa tampoco es fruto de la casualidad. Loovens es agujero y Álvaro, el mejor central para Manolo Jiménez, no siempre puede salvar el centro de la defensa. Sapunaru no será baja y la capacidad creativa de su centro del campo tampoco es para deslumbrar. Movilla con Apoño suelen regar  trabajo físico en la medular mientras Romaric, con sus anárquicas conducciones, puede desequilibrar tanto a su propio equipo como al adversario. Eso sí, los maños cuentan con una amenaza capaz de cambiar el curso del encuentro. Él es Hélder Postiga. Gregorio Manzano tendrá que decidir el nombre de su pareja de centrales valorando las características de este buen delantero. Errar en la elección podría incrementar las posibilidades de derrota.
Para este partido, siempre buscando la victoria, no conviene despreciar el empate. Sumar lo dejaría todo abierto para las últimas cinco jornadas. Y a estas alturas ya es necesario habituarse a la presión del resultado obligado. El momento, de ganar o perder, está a punto de llegar y afrontarlo con naturalidad será más beneficioso que perjudicial.
Al final el fútbol colocará, de forma justa y natural,  a cada equipo en su sitio. Los tres que pierdan la categoría se habrán hecho merecedores de una deshonra que manchará el currículum individual de todos sus responsables.


26 abril 2013

DEFENDER MEJOR ES OBLIGACIÓN


El Mallorca se ha ganado a pulso la vitola de equipo permeable en defensa. Los sesenta y cuatro goles encajados en treinta y dos partidos no son casualidad; son tendencia. En ocasiones no basta con apuntar a la línea de zagueros para extraer conclusiones en el rendimiento defensivo. Pero  esta vez sí. Los mallorquines no han encontrado el punto eficaz en su retaguardia. En flancos existe un poco más de seguridad pero, en el eje, la porosidad ha sido casi humillante.
Goles y ocasiones por doquier son regadas en prácticamente cada partido y la sensación de inseguridad es casi total. El problema es que con esta decadencia defensiva se tendrá que encarar un partido de importancia capital. Por tanto, mejorar y fortalecer este aspecto es primordial.
Gregorio Manzano tendrá que elegir, con suma delicadeza y acierto, a toda su línea de cobertura. Aouate podría volver a situarse bajo palos aunque Calatayud puso el listón alto en su último partido. La experiencia de Antonio López, conocedor a la perfección del oficio de lateral, puede sumar un punto de experiencia dentro del engranaje defensivo del equipo. Hutton se ha hecho dueño del perfil derecho y no parece que vaya a perder su titularidad.  Pero es en el centro de la defensa dónde más dudas pueden aparecer. El Zaragoza meterá a su mejor baza en línea de vanguardia. Es Hélder Postiga. Y aquí se abre una pregunta que puede ser la clave del partido. ¿Qué centrales deben jugar para neutralizar al número nueve portugués?  

 

20 abril 2013

FACILIDADES EN LA DEFENSA




El Mallorca metió una presión alta, valiente y sincronizada pero tuvo condena en su línea de retaguardia. Además los rojos tuvieron que asumir un gol en contra y sólo supieron reaccionar a medias. El Rayo jugó jerárquico, apostando a ganador, llegando a enviar hasta tres balones al palo.
Gregorio Manzano anunció, con más de veinticuatro hora de antelación, su línea de retaguardia y no mintió. Kevin y Hutton en los laterales con Bigas y Geromel en el eje. La línea de cuatro no funcionó y el Mallorca perdió el control por su agujero en el eje. Errores evitables hubieran podido arrancar el punto que al final se consiguió. En el centro del campo se colocaron tres medios centros para intentar dominar una medular que fue difícil de sujetar. Cada vez que el balón rodó por la zona ancha del terreno de juego el control fue alterno. Martí, Pina y Márquez tuvieron que asumir un desgaste extra que no se vio reflejado en el marcador.
El Mallorca volvió a evidenciar demasiados problemas defensivos y sólo la fortuna, junto con un excelso Calatayud, impidió otro gol visitante.
Arreglar la defensa es prioritario. Producir más fútbol de ataque, en un equipo que lucha por evitar el descenso, es complicado y mejorar cerca de la portería propia es más que una necesidad.Todo el trabajo defensivo del trivote, junto con la calidad de Giovani y Alfaro, se termina diluyendo por culpa de la porosidad defensiva. Dentro de la carrera por la permanencia es imprescindible mejorar en defensa o las posibilidades quedarán realmente menguadas.
Sesenta y cuatro goles encajados, además de todas las ocasiones que se regalan en casi cada partido, no son una casualidad. Son una tendencia que lleva al Mallorca hacia la condena.

19 abril 2013

PINTA A PARTIDO ENTRETENIDO


Es el presupuesto más bajo de la Primera División y, sin embargo, su juego tiene la jerarquía y la ambición de un equipo superior. Esta temporada el Rayo Vallecano se ha encargado de recordarnos que el presupuesto de un equipo no siempre es un condicionante insalvable.
Elegir, un estilo u otro, debe depender de las características de los futbolistas y no del dinero que cobran por jugar. Paco Jémez ha tomado bastantes decisiones controvertidas pero, a la vez, muchas veces eficaces. Coquetear con la defensa de tres, jugar con laterales muy profundos, decidirse a salir con el balón jugado y trenzar ataques elaborados son señas de identidad de equipo grande. El Rayo juega arriesgando a ganador casi hasta el infinito. Todo o nada; ese es su lema. Catorce partidos ganados, dos empates y quince derrotas certifican esta filosofía en su juego. Sólo tres equipos, entre ellos el Mallorca, han encajado más goles y, sin embargo, sus cuarenta y cuatro puntos enseñan un objetivo ya cumplido. La salvación está asegurada pero parece no ser suficiente. Este equipo no se conforma. Quiere más.
Pinta a partido bueno, con ritmo y con cierto punto de alternativa. El Mallorca cuenta con dos elementos en ataque que pueden agujerear la línea de cuatro zagueros contraria. Alfaro y Giovani. Estos dos futbolistas pueden picar desmarques a la espalda de laterales y, sobre todo, de centrales y dañar la estructura defensiva del adversario. Pero conseguirlo no será suficiente. Gregorio Manzano ya ha anunciado su línea titular de defensas y éstos tendrán que estar más diligentes que contra el Celta. El Mallorca ha tenido, durante toda la temporada, un problema mayúsculo en el eje de su zaga y en este partido tendrá la necesidad de minimizarlo.  

16 abril 2013

EN FÚTBOL TODO ES POSIBLE


El Mallorca consiguió una victoria que le permite ver el horizonte. Era ganar para respirar y se consiguió. El partido fue discreto, trabado y hasta malo. El Celta jugó mejor sus cartas y consiguió ser superior durante muchos minutos pero perdonó y lo pagó. Gregorio Manzano apostó a un 1-4-3-3 que resultó más desordenado que equilibrado.  Dispuso a Pina, Márquez y Martí en la medular y, entre los tres, no consiguieron hacerse con el centro del campo. Sus evoluciones no ahogaron a los medios centros contrarios y se diluyeron en ataque. Además Hemed y Giovani se pisaron los desmarques ocupando casi los mismos espacios.
Abel Resino metió un equipo más equilibrado. Protegió a Oubiña con Natxo Insa y Álex López e intentó reforzar su línea de presión. El Celta volvió a coquetear con su línea de retaguardia alta pero sin llegar al suicidio. Intentó achicar espacios y consiguió mejorar su juego del centro del campo. Durante demasiados minutos metió el cuchillo y consiguió sangrar a su adversario.
En fútbol todo queda sujeto a variación hasta que la clasificación, de manera matemática, dicta su sentencia. El Deportivo consiguió sumar doce puntos consecutivos, contra todo pronóstico lógico, y demostrar que el cambio de tendencia sí es posible. El vencedor no necesita justificar la victoria y sólo los perdedores buscan excusas de falta de tiempo, malos arbitrajes, lesiones o otras banalidades realmente cómicas. Los futbolistas del Mallorca no pueden eludir su responsabilidad. Ellos, junto con con todas las personas que tienen responsabilidad, han colocado al equipo en esta situación. ¿Podrán conservar la Primera División?

15 abril 2013

EL PRIMER EXAMEN. FINAL DE CURSO


AL Mallorca le restan ocho partidos, cinco como local, y cada uno de ellos ya tiene el color de final. Las semifinales pasaron a la historia. El calendario ha querido que los dos colistas midan su potencial, o sus vergüenzas, en noventa minutos de una importancia capital. Será el encuentro de las necesidades extremas. Mallorca y Celta son, hasta la fecha, los peores equipos del campeonato y ahora les llega un partido sin margen de error. Los mallorquines han encajado la friolera de sesenta y tres goles y ya levantan el cetro, junto con el Deportivo, de equipo más goleado del campeonato. Sin embargo el equipo vigués ha visto perforada su portería en dieciocho ocasiones menos. ¿Defiende mejor el Celta que el Mallorca? No, defiende diferente y, también, es vulnerable. Tira línea de cuatro zagueros hacia delante, con el fin de hacer pequeño el campo, pero su falta de imposición en la medular le suele condenar. Quizás Natxo Insa represente el mejor baluarte posicional para el eje defensivo en la medular. O él, o Alex López, podrían intentar fortalecer la zona de medios. Ya en fase ofensiva es necesario destacar la baja más que importante de Iago Aspas. Su papel, dentro de los desmarques de ruptura, hubiera sido cicuta para los centrales rojos. Sin él, la amenaza viguesa queda limitada pero no eliminada.
El final está tan próximo que ya no se pueden desaprovechar las pocas oportunidades que restan. Hay equipos que están reaccionando y demostrando que durante los últimos quince partidos se puede girar la tendencia. Ahora la pelota está sobre el tejado rojo. ¿Podrá hacerlo el Mallorca?

07 abril 2013

EL BARCELONA SACÓ EL RODILLO




La diferencia existente, entre amos contendientes, se plasmó de manera cruel sobre el terreno de juego. Conservación del balón y localización fueron condena para los rojos. Intentar ganar la posesión al Barcelona es misión imposible pero minimizar, con algo más de eficacia, sus efectos es factible. El Mallorca se diluyó como un azucarillo. Jugó un mal partido y no opuso la resistencia que debe encontrar cualquier contrario cuando juega al fútbol.
Gregorio Manzano lo intentó tocando su organización pero terminó pareciendo un rival de inferior categoría. Se volvió a pasar al 1-4-4-2 metiendo a Pina con Tissone en la zona de medios. Alfaro y N'Sue jugaron en banda para que Hemed fijara centrales y Giovani pudiera encontrar un poco de espacio a la espalda de Song. Pero el Barça decidió sacar el rodillo y aplastar a su rival sin piedad.
Llegó el descanso y el Mallorca apostó a tres por dentro. Los catalanes contestaron de forma rápida y expeditiva. Gol en el primer minuto del segundo tiempo y a jugar una pachanga hasta el final del partido.
Analizar las variantes tácticas puede resultar casi cómico. Al Mallorca le faltó presión, agresividad e intención. Perder, contra el Barcelona,  es una posibilidad pero capitular con el primer gol resultó francamente doloroso.
Es partido para no olvidarlo. Recordar los errores debe ayudar a encarar los dos próximos compromisos ligueros. Son seis puntos que deben ganarse para tener opción a soñar. Jugar, contra Celta y Rayo, con el rigor necesario ya es cuestión de supervivencia competitiva. Las carencias individuales deben corregirse con solidaridad colectiva y la agresividad debe recuperarse de forma inmediata.

06 abril 2013

CON TODA LA INTENSIDAD





Jugar contra el Barça en su estadio, con las dimensiones del terreno de juego y con el verde a veintidós milímetros, es tarea para titanes. Pero si hay que elegir una fecha para hacerlo, posiblemente, la mejor sea ésta. Para los catalanes el partido es un compromiso molesto. Este campeonato ya tiene campeón asignado y los partidos de Liga que restan estorban más que benefician. Y, además de la competición doméstica, están en medio de unos cuartos de final de Champions, no decididos, y con jugadores de rango en el dique seco. El mejor futbolista del planeta fútbol no podrá jugar y en la línea de retaguardia, concretamente en el eje, pueden aparecer pequeñas fisuras aprovechables. Pero aun así el potencial es tan exagerado que vencer es casi un imposible.  
Para el Mallorca la Primera División está en juego y en todos los duelos individuales que se produzca se debe notar aspereza y tensión.  Los rojos deben entrar al partido de forma directa, sin bromas y con contundencia. El fútbol es deporte de contacto y, dentro del reglamento, la intimidación también forma parte de este deporte. Ya dentro de la organización del juego será imprescindible no perder ni la calma ni el saber estar. Metas muy cortas, resistiendo las embestidas en los minutos de agobio, será imprescindible; no suficiente. Golpear a balón parado, generar alguna situación de estrés a la contra y no perder el esférico, en zona de riesgo,  también será más que necesario. Pero sumándolo todo tampoco será suficiente. Contar con una buena dosis de fortuna y salvar los beneplácitos arbitrales, que siempre tratan con dulzura a Real Madrid y Barcelona, también serán avales casi forzosos.
Realmente tampoco hay que buscar obsesión en este encuentro. Las diferencias son tan magníficas que en cualquier jugada, de puro talento, todo el trabajo defensivo puede caer en balde roto. 


01 abril 2013

SUPERADOS Y TOCADOS




Contener las emociones, sin bajar la intensidad, fue parte importante en la clave del éxito del Deportivo. Jugar a ganador no significa arriesgar hasta el infinito. En los enfrentamientos directos hay que ser eficaz, resolutivo y tener oficio. El Deportivo lo tuvo todo.
La primera parte transcurrió con un intercambio de golpes más que interesante. Ambos contendientes asumieron riesgo en fase ofensiva. Los cuatro laterales se incorporaron al ataque aunque los gallegos fueron más agresivos. Silvio y Manuel Pablo fueron incisivos, profundos y valientes. En el Mallorca hubo un poco más de conservación desde la tercera línea. Sólo el lateral en banda fuerte de balón rompió hasta línea de fondo. Si Hutton llegaba, Luna guardaba.
Jugar con trivote puede favorecer, nunca asegurar, la superioridad numérica en la medular. El Mallorca consiguió hacerla efectiva sólo durante un tercio de la primera parte. Durante los primeros veinticinco minutos cada vez que el balón rodó, por la zona de medios, los tres futbolistas rojos ahogaron la posibilidad de trenzar buenos ataques, o contraataques, al contrario. El Deportivo no encontró situaciones adecuadas y cayó en la trampa roja. Pero llegó el gol de Silvio y todo cambió. A partir de este instante la mejoría gallega se impuso al juego mallorquín. 
Manzano tocó y cambió el sistema de juego. Pasó a 1-4-4-2 y falló. Tissone y Pina se vieron insuficientes para ocupar y detener a un contrario que creció a medida que avanzó el encuentro. Los espacios libres fueron atacados mejor por los gallegos que supieron adaptarse, más y mejor, a las circunstancias del juego.  El partido se decidió por dentro y aquí el Deportivo estuvo mejor.
Después de este resultado, con la inminente visita al campo del Barça, el Mallorca queda en manos de la épica.