29 octubre 2007

¿QUIEN SERA EL PROXIMO?


No es que sea un enfervorecido defensor del estilo de juego que ha desarrollado el Valencia con Quique Sánchez Flores en estos últimos años, pero seis victorias de los últimos nueve partidos y estar en posiciones de Champions parece ser que no es mérito suficiente para la directiva del Valencia que pretende objetivos muy superiores para su equipo.

Si el crédito que tiene un entrenador es tan estrecho como el que tenía el preparador valencianista es mejor recuperar la vida que seguir trabajando con una confianza tan pequeña. Quizás existan problemas de mayor calado que los aficionados jamás conoceremos, lo que me parece absurdo es que en tan solo nueve jornadas se prescinda de un entrenador.
Como siempre me quedo con las ganas de preguntar al responsable del cese:

¿Qué ha pasado después de nueve partidos para dejar de confiar en su entrenador?
¿Será igual de exigente con el siguiente entrenador?
¿El objetivo es la liga, la champions y si no se consiguen dimitirá de su cargo?

21 octubre 2007

BUEN VILLAREAL


En ocasiones el fútbol te obsequia con la posibilidad de jugar un partido de competición con la posibilidad de simplemente disfrutar sin pensar en exceso en el resultado. Eso es lo que le sucedió al Villareal en su partido con el Barcelona.

Sin apenas darse cuenta se encontró con dos goles y el partido casi cerrado a su favor. Desde ese instante el submarino amarillo brilló en todas las facetas del juego, mostrando una presión que ahogaba la línea de creación del equipo de Rijkaard, buen sentido en el juego colectivo y tratando al balón de manera exquisita. El equipo de Pellegrini transmite buenas sensaciones en la elaboración del juego, Cani y Cazorla tienen la profundidad necesaria para desequilibrar en el juego exterior y Pires me encandila cada vez más con su juego con el que es capaz de desnivelar cualquier defensa por estructurada y entrenada que esté.

Lesiones, una disminución de la actitud ante rivales de menor fuste, el desgaste propio de la competición y las dudas propias ante la posibilidad de conseguir los mayores logros posibles serán el caballo de batalla de Pellegrini para esta temporada.
¿Podrá el Villareal presionar a los más grandes por el título?

10 octubre 2007

LA MISMA HISTORIA


La primera cabeza de un entrenador de primera división ya ha sido guillotinada, sólo siete jornadas ha tenido de crédito Abel Resino y no es que me parezcan ni muchas ni pocas, simplemente me parece absurdo andar con la misma historia cada año.

La inmediatez es la palabra que debemos tener siempre presente los entrenadores de fútbol, el resultado de esta semana es lo más importante.

Diseñar un estilo de juego que encaje con la idiosincrasia de una afición y disponer del tiempo necesario para asentarlo, planificar el crecimiento futbolístico de los equipos inferiores para rentabilizarlos en el primer equipo, diseñar y elegir en que momento de la temporada el equipo debe alcanzar sus picos de máximo rendimiento físico, evaluar errores del presente para mejorar en el futuro, serían unas de las muchas variables que un entrenador puede diseñar en la Premier y que aquí en España es utópico.

Deberiamos reflexionar un poco todos al respecto cuando sólo culpabilizamos al entrenador de una mala trayectoria de siete partidos y no me sirve la excusa de que la cuerda se rompe por el lado más débil ni que es más sencillo cambiar a una sola persona que a toda la plantilla.

En cualquier caso el fútbol está lleno de ejemplos en los que el cambio de entrenador ha surtido efecto y también en los que ha sido completamente inútil. La decisión de un cese tendría que adecuarse a criterios más objetivos que únicamente a la trayectoria de unos pocos partidos de competición.

04 octubre 2007

LA CODICIADA CHAMPIONS


Posiblemente sea el laurel más preciado por cualquier entrenador del mundo, la dificultad y la competencia para conseguirla es máxima.

Sólo uno de los treinta y dos equipos conseguirá la gloria de la victoria, intentar conseguir llegar en el cénit de la curva del esfuerzo colectivo en cuanto al estado físico de los jugadores, contar con el talento técnico defensivo y ofensivo necesario, sincronización de movimientos y evoluciones tácticas que sean casi perfectas, disponer de un equipo con la suficiente fuerza mental y hambre de victoria son algunas de las variables que los entrenadores necesitan para conseguir esa codiciada copa.

Y si todo eso no fuera suficiente en determinados momentos el equipo ganador deberá contar con ese factor que tanto odiamos los entrenadores por no poder ni entrenarlo ni controlarlo, la diosa fortuna.