La prensa en general no hace justicia con un futbolista exquisito en su técnica individual en la que sobresale el dominio del pase largo.
Su calidad en ese tipo de pase es tan fulminante, que desde la banda derecha es capaz de romper cualquier sistema defensivo granítico y dinamitar al máximo las basculaciones del equipo contrario, obligándolo a un desgaste físico más elevado de lo normal.
Las acciones a balón parado con D. Beckham adquieren una dimensión completamente diferente. Probablemente el pretender neutralizar dichas acciones con marcajes al hombre o mixtos pudiera ser un planteamiento totalmente erróneo. La salida del balón es tan limpia y exquisita que el defensor tiene auténticos problemas para dominar en su visión periférica el balón, el atacante (que pretende desmarcarse) y no perder la orientación con respecto a la propia portería.
¿Es D. Beckham el mejor banda derecho del mundo dentro del sistema 1 4 4 2?
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