Contraataque iniciado por Jonás desde su banda derecha buscando el tímido desmarque de ruptura de Arango que con un taconazo y habilitando a Víctor que finalizó su acción ante Bizarri con una tranquilidad y un talento digno de los mejores. Lo mejor del partido.
A partir de aquí desequilibrio táctico en el Mallorca que no supo combinar su juego defensivo con contras para aprovechar todos los espacios que dejaba el Nàstic a la espalda de Matellán y Navas.
Esto es lo peor que le podía pasar a un equipo como el Nàstic que tiene máxima dificultad para organizar sus ataques posicionales. Pero el equipo de Paco Flores lo intentó de todas las maneras posibles.
Alargando las posesiones de balón al máximo aunque con circulaciones algo lentas, intentando desbordar por banda en profundidad con Gil y Campano, buscando desdoblamientos ofensivos de sus laterales, metiendo balones directos desde la fase de iniciación, metiendo a Rubén Castro y a Portillo en punta, oxigenando la banda izquierda en la segunda parte y colocando a un falso banda derecha, pero todo fue insuficiente.
El Mallorca cerró los pasillos interiores y los ataques del Nàstic morían sin peligro en las inmediaciones de la frontal de área.
Una vez conseguida la sexta victoria consecutiva en Son Moix nos podriamos preguntar:
¿Qué objetivo debería haber tenido este equipo durante esta temporada?
¿La plantilla tiene el talento suficiente para desbancar a Recreativo, Espanyol, Racing?
¿Debemos conformarnos con el objetivo marcado por Gregorio Manzano?
A partir de aquí desequilibrio táctico en el Mallorca que no supo combinar su juego defensivo con contras para aprovechar todos los espacios que dejaba el Nàstic a la espalda de Matellán y Navas.
Esto es lo peor que le podía pasar a un equipo como el Nàstic que tiene máxima dificultad para organizar sus ataques posicionales. Pero el equipo de Paco Flores lo intentó de todas las maneras posibles.
Alargando las posesiones de balón al máximo aunque con circulaciones algo lentas, intentando desbordar por banda en profundidad con Gil y Campano, buscando desdoblamientos ofensivos de sus laterales, metiendo balones directos desde la fase de iniciación, metiendo a Rubén Castro y a Portillo en punta, oxigenando la banda izquierda en la segunda parte y colocando a un falso banda derecha, pero todo fue insuficiente.
El Mallorca cerró los pasillos interiores y los ataques del Nàstic morían sin peligro en las inmediaciones de la frontal de área.
Una vez conseguida la sexta victoria consecutiva en Son Moix nos podriamos preguntar:
¿Qué objetivo debería haber tenido este equipo durante esta temporada?
¿La plantilla tiene el talento suficiente para desbancar a Recreativo, Espanyol, Racing?
¿Debemos conformarnos con el objetivo marcado por Gregorio Manzano?
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