El Real Madrid cayó ante el Olympique Lyonnais en un partido en donde dispuso de altas cotas de posesión pero no llegó a controlar el partido en ningún momento.
Me sorprendió ver, por una vez, un planteamiento racional de Claude Puel. Esta temporada he visto al Lyon jugar con 1-4-4-2, 1-4-3-3 y 1-4-2-3-1 pero siempre con enormes dudas tácticas. Contra los blancos Puel fue más conservador y se pasó al 1-4-5-1. Apostó por no perder y venció. Colocó a tres medios centros a trabajar a destajo. Pjanic, Makoun, que adelantó su posición para ahogar a Xavi Alonso, y Toulalan corrieron como auténticos demonios para así favorecer las contras de Gouvou, Delgado y el gran Lisandro. ¡¡¡Qué partido se marcó el argentino!!!. Puso pausa, tiró desmarques por doquier y consiguió despejar el trabajo del "Chelito" y de Gouvou. A todo esto hay que añadir la sobriedad y el equilibrio de Toulalan que ayudaron a que los franceses salvaran este primer asalto.
No tengo dudas y sigo pensando que los de Pellegrini siguen siendo favoritos pero, eso sí, sus posibilidades ahora han menguado.
Esta es una lección que los blancos tienen que aprender. Esto es Europa y en la Copa de los inmortales, cuando estas en octavos, cualquiera te puede vencer.
P.D. Quedan dieciséis supervivientes y todos ellos se merecen el respeto que se han ganado en el campo.
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