La calma es sinónimo de víspera de tempestad. La guerra continuará en Febrero. Ahora los dieciséis elegidos se centrarán en su competición doméstica para llegar a unos octavos que serán potentes, duros y letales.
La federación inglesa presentará su candidatura con cuatro equipos. Chelsea, Arsenal, Tottenham y United quieren la gloria de Wembley y esto les convierte en rivales muy peligrosos.
El Valencia tendrá que superar el choque contra un primero de grupo y tanto Barça como Madrid son claros aspirantes al título.
El Calcio ha colocado a sus tres equipos como segundos de grupo. Milan, Inter y Roma tendrán que jugar con la desventaja del factor campo. Pero cuidado son italianos, son supervivientes.
Francia quiere tener su cota de protagonismo. Marsella y Lyon pueden ser rivales incómodos. Sobre todo el equipo de Claude Puel que tiene talento y desequilibrio en todas sus líneas.
El gigante alemán, herido y arrinconado en la Bundesliga, se jugará sus cartas en Europa con sus dos estrellas, Ribery y Robben. El Schalke intentará dar la sorpresa aprovechando el factor camp. La voracidad de Raúl está fuera de toda duda.
Y dos invitados más acudirán a la fiesta de los octavos. El fútbol físico del Kobenhavn y el toque brasileño del Shakhtar Donest.
PD. A partir de aquí uno muere y el otro sigue. Es el fútbol en estado puro.
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