El primer
partido, después del cambio de entrenador, es vital; casi trascendental. El
efecto de sustituir un líder, por otro, necesita el aval de un resultado
inmediato. Y el Mallorca, con poco esfuerzo y mal juego, no lo consiguió. Más
allá de las decisiones tácticas, siempre importantes, se pudo testar la actitud
mental competitiva de todo el grupo. Y el resultado fue totalmente negativo. Es
imprescindible destacar que el rival era el Barça B y no su hermano mayor. Los
rojos saltaron al terreno de juego con un respeto excesivo. Incluso antes de la
primera expulsión ya se pudo intuir un conservadurismo excesivo.
Lluís
Carreras tomó sus primeras decisiones.
Aouate bajo palos; sólo duró unos
minutos. Línea de retaguardia con Bigas en flanco izquierdo y Ximo bajo el
perfil derecho. En el eje se juntaron Agus con Cadamuro. Toda la zaga volvió a
estar realmente porosa y vulnerable.
Pero lo más importante pasó por delante. Movimientos de presión nula,
escasa y demasiado retrasada. Hemed y
Gerard fueron punta de lanza mojada teniendo que quedar, éste último, escorado
a una banda como consecuencia de las expulsiones.
Por su parte
el rival jugó a los suyo. Imprevisible y, a la vez, previsible. Juego de
posesión y localización en campo contrario. Los de Eusebio Sacristán marcaron
territorio desde el inicio. Ya desde el primer minuto la jerarquía de partido
tuvo dueño total y absoluto. Y fue el Barça B. Después llegaron la cambios de
ritmo personalizados en Denis Suárez y Dani Nieto que, unidos a la inferioridad
numérica, fueron la puntilla que mató el partido. En cuanto a la segunda
expulsión es merecedora de sanción. Un profesional no puede abandonar a su
equipo en momentos de tanta necesidad. En cualquier caso son estos futbolistas,
y no otros, los que deben salvar una situación más que delicada.
Una mención
especial merece la ausencia de la afición de base. Las peñas de un club son un
trozo de su escudo. Su ausencia, durante el partido, debería significar una
profunda reflexión por parte del Presidente y de todo el Consejo de
Administración. Seguir así no ayuda ni al equipo ni a la institución.
No hay comentarios:
Publicar un comentario