03 marzo 2013

SIN SEMIFINAL NO HAY FINAL




Conviene no olvidar que para jugar una final es necesario ganar la semifinal. El margen ya no existe; se esfumó. El Mallorca jugará el encuentro en Los Carmenes con un único objetivo válido; la victoria. No hay más opción que ganar. El empate no es suficiente y arrastrar los tres puntos hacia el casillero es una pura cuestión de longevidad competitiva. En fútbol hay oportunidades que no pueden dejarse escapar; ésta es una de ellas. Vencer, será acercar numéricamente la salvación, aumentar los depósitos de confianza y lanzar un mensaje positivo a todo el entorno futbolístico.
Pero en este deporte todo es sencillo, de escribir, pero difícil de ejecutar. Reinar, con éxito, en Granada será tarea para domadores de leones. El equipo de preside Enrique Pina ha mejorado en todo. El cambio de entrenador y las nuevas incorporaciones han transformado a un equipo realmente difícil de superar.
El Mallorca tendrá que entrar al partido con intensidad pero sin precipitación. Los futbolistas de Gregorio Manzano deben cuidar cada minuto tal y como se merece. Meter más presión de la necesaria no hará más que bajar el rendimiento y consecuentemente afectará al resultado.  El Granada intentará hurgar en la ansiedad roja y evitarlo será un aspecto psicológico casi vital. En cualquier caso hay un precepto ineludible que no puede esconderse de ninguna manera posible. El Mallorca necesita ganar, sí o también.

No hay comentarios: